lunes, 21 de marzo de 2011

TRES DÍAS, TRES LUCES, TRES NOCHES

MÁS HISTORIAS DE APAGONES Y RELÁMPAGOS

19 de marzo de 2011.
La luna anda extraña. Crece, se resbala
no duerme.
Su ojo abierto en la noche alucinada distrae
esta ciudad de ratas soles y muertes
distrae
el transeúnte
la durmiente no se ilumina ni puede dormir
la luna distrae
distrae.  
Demasiado grande, blanca a más no poder
farol tras la persiana a medio cerrar
distrae la luna amada, distante al amor
y símbolo de los amantes.

20 de marzo de 2011
Radiaciones desde Japón.
Como en mi infancia vuelven las recomendaciones
los miedos a la lluvia radiactiva
las discusiones sobre la ciencia, la inconciencia
los necesarios límites al hacer.
Millones en Japón tiemblan al frío de la nación más sabia
el terremoto ha destruido sus casas, el maremoto enarbola el pánico.
Mientras, cuatro reactores nucleares cumplen su destino
se inunda de radiaciones la atmósfera
hay héroes inútiles entre los bomberos
y la madre que llora a su hijo es inconsolable.

 

21 de marzo de 2011
Primavera, por supuesto.
Año nuevo entre persas, náhuas y más pueblos.
Hace calor en México, frío donde entra el otoño o el invierno ha sido persistente.
Yo no hago nada, sólo despierto con vagos dolores.
Las hojas de un arce asmático tiemblan al viento de los tubos de escape
mi ventana se tiñe de azul.


Espero una lluvia que dé cauce a tanta melancolía.