jueves, 2 de diciembre de 2010

MADRE DE FUEGO: MAMA TUNGURAGUA

Poco a poco estamos superando nuestra ríspida confrontación con el Ecuador. Es que una anciana que te sonríe en el camino y propone acompañarte porque "son nomás dositas" y ser dos es demasiado poco entre el rugir de la volcana Tunguragua, hermosa, furiosa, potente madre de fuego, unas montañas donde dicen que están escondidos los tesoros del Reino de Quito que nadie puede encontrar, las cascadas de una agua tan fecunda como poderosamente refrescante y tumultuosa.... es que una anciana así no puede no amarse y esa anciana es en parte la gente del Ecuador.
Yo sí, lo sé, estoy ligada a los seres humanos. Nada qué hacer, más alla de los demás seres humanos: mujeres y hombres son mis nahuales, me protegen, me representan, soy su doble en la tierra. No amo los países donde su gente no es amable. Y la gente en el mundo está dejando de ser amable. Piensen en las y los italianos, tan simpáticos cuando eran pobres, miserables, divertidos, silbantes cantarines de las calles y tan odiosos y prepotentes hoy que actúan como racistas huevones. En las y los mexiacanos antes de ser empujados por la paranoia por la "seguridad" (sea lo que sea que ese concepto quiera expresar) a temerle hasta al vecino... en los amistosos suabos.
La gente donde es linda hace lindo el paisaje y donde se agria lo afea.
Claro, hay pueblos de simpatía inmediata, dulces como el agua panela y otros más osunos. Me temo que el ecuatoriano es uno de ellos. Un poco como los griegos, hay que darse cuenta que son amistosos, timidos, seguros e inseguros de sí al mismo tiempo.
Y además la medicina está en vía de volverse gratuita: es un orgullo nacional que cada día un servicio más salga de la medicina privada para adquirir un caracter público y gratuito. La constitución definde el medio ambiente a nivel mundial y el gobierno denuncia a British Petroleum por lo que ha hecho en el Golfo de México. Todos menos los escuálidos de siempre pagan impuestos porque saben que van a redundar en su beneficio.
Claro, eso se descubre después de haber confrontado a la empleada de correos que te pide un permiso del ministerio de cultura para enviar ¡un poster de Guayasamín! Tras haberte dado de topes con el hecho que las oficinas de la CONAIE se parecen al Castillo de Kafka y sólo tras insistir una y otra y otra y otra vez la dirigenta de la secretaría de la mujer y la familia deje de hablarte repitiendo lo que está impreso en el folleto que acaba de entregarte. Tras nunca saber si los mensajes que dejaste en la Universidad Intercultural llegaron alguna vez a su rector.
Los primeros días fueron un dolor de cabeza, una nostalgia por Colombia, una gana inmensa de mandar al demonio el encuentro con este pueblo que luego te habla de la defensa de los derechos de los animales y su casi perdida batalla contra las corridas de las Fiestas de Quito, las peleas de gallos y los zoológicos privados... pero no por ello no la emprenden.
Los muros del país llevan pintas a favor del aborto y los derechos de las mujeres aunque haya una iglesia en cada esquina.
Hay historiadores maravillosos como Jorge Núñez y Jenny Londoño, amantes de las libertades y de todos los personajes liberales del país, que se detienen a reflexionar sobre el por qué nosotras defendemos los derechos de todos los pueblos a la autodefinición y por qué aun admirando muchas cosas del actual gobierno seguimos creyendo que no se puede, que no se debe decir qué pueblos representan a los indígenas del país. eso es, si hay 18 nacionalidades el poder nacional no puede escoger arbitrariamente sólo dos lenguas, el kichwa y el shuar, para decir que el país es culturalmente diferenciado.
Hay, hay, hay cositas que descubrir poco a poco en ecuador y sorpresas. Cuandoe stuvimos encerradas todo un día para que el país fuera censado, no enteramos que son maestros y estudiantes los que tienen derecho a moverse de casa en casa. las preguntas nos tocan a todas y todos, aun a las turistas. El día después, concienzudamente, los peridódicos reportaron 975 detenidos por salirse de su casa o por violar la "ley seca". En fin, las y los ecuatorianos son bastante obedientes.

Luego vimos nuestro primer condor, bueno eran tres y presos/salvados en un hermoso jardín zoológico de animales rescatados por un veterinario de casas donde los abandonan o dejan de darles de comer.

Habían tantos animales: buitres rey, galápagos, monos arañas y capuchinos, osos de anteojos, pumas, jaguares, y una tapira más gorda de las de Belice, una piara enorme de pecarís que no hedían (eso sí que es un milagro), por lo menos 5 tipos diversos de guacamayas y loros, loritos y demás pájaros, muchos tipos de cuy, y otros maniferitos de caritas listas. La Osa, que inmediatamente bautizamos Pacunta, ternía un osesno.









 Condorísimo









 Un capibara


 El mono capuchino




 Esta Galápago tan bella tiene casi cien años. Nos levantó la cabeza cuando llegamos y nunca dejó de mirarnos con amor hasta que le dijimos "adiós". Entonces se agachó y se puso triste





 Mi bebé, perdón, su señoría Helena Scully Gargallo, ante el Pastasa



 El nacimiento del Pastasa... una fuerza que escarba montañas

Luego tomamos un bus y llegamos a Riobamba. Ahí estaba el marido de Mama Tungurahua, el famoso Chimborazo. Guapo el muchacho, ni  pa´ qué decirlo, pero la verdad es que no tiene la personalidad de su esposa. Es que está calladito y en pose.
De Ambatos, pues, qué decir: pasen a comprar pan y váyanse. Pero no hagan lo mismo con otros pueblos de nombres altisonantes. Y la gente alejándose de Quito se vuelve a cada paso más amable, simpa´tica, comunicativa. Un señor de bello sombrero me contó de todos los cultivos de la sierra, mostrándomelos.  Me dijo que no quiere a la invasión de invernaderos que deforman los paisajes, porque los dueños cultivan con muchos químicos que ensucian el agua y nuestros cuerpos. Me habló del maíz, de como se prepara el mote, de que no es bueno comer mote descascarado, mientra es delicioso con poroto (fríjol, fréjol ,poroto, todos son frijoles).